¿Cuánto vale la vida humana?.

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Por alguna razón, concluí esta semana laboral escuchando conferencias sobre el término "valoración", aunque la definición que recibí está ligado al proceso que se sigue para dar valor económico a un determinado bien o servicio.

Y ahora en mi casa viendo un noticiero local (el Loretano), narran la desgracia ocasionada por la motonave Sofy, en contra de una humilde familia, cuya canoa fue embestida por esta motonave, trayendo como saldo la desaparición y probable muerte de 2 niñas, lo que más me indigna es la falta de humanidad por parte de la empresa y sus trabajadores.

Extendiendo la reflexión a otros ámbitos de mi vida (en cosas que he visto o he vivido), sencillamente debo admitir que el tema "valoración del ser humano", esta íntegramente relacionado a la frase "Cuanto tienes, cuanto vales".

Basta con ver los noticieros, o cualquier programa de la tv, para darse cuenta de la segregación humana a partir de aspectos económicos. Basta con ir a comprar a una tienda o un restaurant, o con ir a un concierto (las peores ubicaciones siempre dan a los precios populares), para vivir en carne propia ello. Es como si la gente de menos recursos esta condenada a recibir los peores tratos. Incluso vi en eventos que las anfitrionas, solo son amables con las personas bien vestidas y con buena apariencia. Nadie es amable con los humildes y necesitados, porque los más fuertes y solventes, tienen en sus esquemas mentales, como acto natural, la vulneración de los débiles y desamparados.

¿Porque nosotros abuzamos de la ingenuidad y humildad de las familias del campo?. ¿Por que cuando nuestros agricultores llegan a nuestros puertos, los rematistas los abordan y si es posible nos les pagan nada?, y con ello el hombre del campo, es el menos favorecido (estafa al 100%). Al empresario, autoridades o otras personas a la hora de interactuar con ellos no escatiman condiciones favorables hacia ellos. Como por ejemplo este accidente, donde pensamos que los responsables deben tener cuidado a la hora de desplazarse, pero a ellos poco les importa la vida de esta gente. Manifiesto mi más profundo rechazo, no sólo a esta acción de la motonave, sino a todas nuestras actitudes mezquinas con la gente del campo (si se contarían estoy seguro que igualarían a las estrellas).

Yo mismo viví una experiencia parecida, aunque sin perdidas humanas, el año pasado fui a pasear por el rió nanay, la embarcación estaba provista de un peque-peque, era lo que típicamente llaman aca en la selva un llevo-llevo. Como a 15 minutos del puerto de Bellavista, divisé una embarcación de la patrulla Guardacosta (tenias 2 motores de 200 caballos de fuerza). Era una embarcación inmensa, que al pasar generaba tremendas olas; cuando la patrulla nos cruzó, nosotros nos preparamos para recibir sus olas (estábamos en medio del rió Nanay), cerca de nosotros estaba otra embarcación de pescadores, similar a la nuestra. Luego de pasar las olas, me percaté de que nuestra embarcación iba embestir a la otra, lo que generó pánico en los 2 botes. Habían señoras de edad, niños y hasta recién nacidos, y todos ellos regresaban a sus comunidades. Y nuestra embarcación choco y partió a la otra, y en menos de 10 segundos, vi que fue
hundida, y los pescadores luchaban por salvar al menos motor, vi un niño desesperado subiendo a nuestro bote. El movimiento de las olas aún no se acababa. La impotencia e ira se apodero de mi ser.

Al final vi gasolina esparcida en el agua, y un pescador, ya en nuestro bote agarraba su motor peque-peque, que estaba siendo jalado por la parte trasera de su bote hundido. En verdad la escena era aterrorizadora. Y yo estaba sentado y listo para lo peor. Algo que incremento el pánico fue que el motor de nuestro bote no prendía (y nunca llegó a prender), y daba la sensación que también podríamos hundirnos.

Luego vinieron otros botes, nos rescataron y nos llevaron a la orilla. A los 5 minutos regreso la patrulla, y vinieron 2 militares a insultar a los motoristas, ambos tenían dejo andino y se mostraban intratables, luego preguntaron acerca de los daños, culparon a los motoristas, y los presionaron para callar diciendo que si denunciaban iban a salir perdiendo, y yo vi a uno de los militares dándole 10 soles al motorista afectado. Como si toda esa desgracia solo valía 10 soles (3 dólares). Como si la vida de todos nosotros equivalía a esos míseros 10 soles. Donde la falta de humanidad, irresponsabilidad, discriminación, menosprecio se podría comprar con tan poco. No es que yo crea que debió darle más dinero, sino que nuestros comuneros y nativos, constantemente reciben ese tipo de trato, y esto viene desde las primeras incursiones del denominado hombre civilizado. No tengo nada en contra de las fuerzas armadas, pero el trato que tienen con la gente humilde es miserable. Y lo repudio desde esta tribuna, pues todos los meses pago mis impuestos, y me gustaría que los servidores públicos tengan mas humanidad, que de verdad den el valor humano de las personas.

Casi todas las familias que viven en el área rural, tienen como principal aliado al uso de pequeñas canoas, como instrumento de sus actividades extractivas y productivas. Y en casi todas las interacciones con medianas y grandes embarcaciones, se suscitan situaciones de peligro. El punto de quiebre es que los motoristas no tienen la más mínima consideración con ellos. Que pena en verdad el caso de estas niñas, solo esperamos que en el futuro se de mayor valor a la humanidad, de los contrario tantas filosofías y romanticismos de todos nosotros los "civilizados" no habrán servido para nada. No solo se deben crear leyes, que amparen el derecho a la igualdad y respecto, sino la formación familiar y escolar debe incluir de forma resaltada principios equidad y respeto por todos los seres humanos, sin tener en cuenta su origen racial, condición económica, forma de hablar, tamaño, procedencia, barrio, colegio, etc.

Esperando que algún abogado voluntario o alguna radio apoye a esta familia, defendiendo sus derechos. No hablo de la defensoria, pues las veces que escuche que intervienen no llegan a ningun lado. Solo llevan las estadisticas de algunos casos de abuzos, en fin este es el Perú. Espero que cambie para bien.