La función del Circo debe Continuar, Congreso de la República que asco que me das.

En verdad, no se que pensar de lo que pasa diariamente en el Congreso de la República, desde hace unos meses que tengo la oportunidad de seguir diversas sesiones y debates, se puede apreciar cada barbaridad que realizan los mal llamados padres de la patria. He visto de todo, desde peleas entre congresistas por ocupar una oficina, discriminación, intolerancia, menosprecio, desde defensas incoherentes, hasta discusiones ilógicas, desde hipocresía, falta de seriedad, faltas de respeto, hasta el robo hormiga continuo de equipos de cómputo. No se que pensar, no se si es el Congreso de la Republica, o es un bar de mala muerte, pero las aberraciones que diariamente se suscitan allí le quitan la seriedad que tendría que tener nuestro llamado Poder Legislativo.

Pero en fin, este órgano gubernamental es una representación de la ciudadanía peruana; visto de esta perspectiva es un termómetro de la conducta, educación y carácter de la población peruana. Por lo que creo que no nos debe extrañar los escándalos que en él se susciten. Algunos dicen que las naciones tienen las autoridades que se merecen, por lo que el congreso es una representación de nuestra realidad, de lo mal que estamos como país, de la escasa moral y de la falta de ética, tolerancia y coherencia en nuestros actos.

Respecto a los congresistas loretanos, me da vergüenza como loretano, el accionar del congresista Vargas, que siempre ha respondido a los intereses de su partido, y se ha olvidado que a él no lo puso allí su partido, sino miles de votos loretanos. No entiendo como él puede preocuparse más por lo que le pase a su partido mientras Loreto, sigue estando en las últimas ubicaciones en calidad de vida de la población.

En estas últimas semanas, el caso más sonado, que incluso demandó decenas de horas de debate y discusión en el congreso, fue el intento de interpelación del Ministro del Interior, Luís Alva Castro (ex candidato a la presidencia en el año 2000 por el APRA), por los sonados casos de la compra de los insumos para la policía nacional, y el sonado caso de los patrulleros. Estoy seguro que pocos peruanos se imaginan el desgaste que concitó este problema en el tiempo y atención de los congresistas (misma desgaste se dio con el caso Fujimori). Sabiendo que en el Perú hay miles de problemas que requieren de pronta solución, relacionada a millones de peruanos que viven en la extrema pobreza.

Tanto lío, tanto tiempo y tanto polvo levantado, para que el día de la verdadera votación surjan ausencias en las bancadas de oposición, en verdad se me vinieron las mismas sensaciones que sentía cada día que veía en los noticieros a políticos de diversas bancadas pasarse al grupo fujimorista en pleno reinado montesinista (la década pasada). El APRA, negoció exitosamente y consiguió neutralizar a varios congresistas de la oposición, el pedido de Censura consiguió 51 votos (necesitaba 60), con 27 inasistencias y con la neutralidad de los congresistas fujimoristas (estos estan jugando ajedres), sería bueno conocer el listado de todos esos congresistas que justamente hoy no pudieron estar en el congreso, yo simplemente creo que si hubo arreglo con el partido de gobierno, pero en fin eso dice que es la política.

Al final con estas perdidas de tiempo, los congresistas siguen cobrando sus sueldos, y el único que pierde es el Perú.