¿Quien robo mi celu?
Quizá esta es la semana más estresante que vengo viviendo en lo que va del año y desde hace mucho tiempo, 3 presentaciones de webs y sistemas de información, asesoría a la web de una municipalidad distrital, agobiante recolección y carga de fotos históricas de la amazonía (nueva carnecita de Lorito.com.pe), escribir un documento conceptual de los procesos internos de un sistema nuevo que tamos haciendo (en las madrugadas), reuniones y reuniones, mantener el blog, la promoción y ofrecimiento a otras empresas de nuestras soluciones tecnológicas (en las noches), y la preparación del primer aniversario de Lorito.com.pe (con mi querido y empeñoso equipo), han hecho que está semana extremadamente estresante. Hasta volado me estoy percibiendo. ¿Y tiempo para mi enamorada? Sé que debe estar molesta, y felizmente no soy mujeriego. UFFFFF
Siento un carga horripilante en mi espalda, estoy en Lima ahora preparando una exposición para el lunes. Ayer con tanto ajetreo, en la media noche al momento de salir del aeropuerto quise llamar a un hotel para hacer una reservación, tenía mi agenda y el celular en la mano, así que puse el celular arriba del teléfono público, y atrás mío estaba una señora edad madura simpaticona, ella también quería usar el teléfono, quise ser amable con ella, terminé la llamada y me aleje lo más pronto del teléfono, salí rápido cogí un taxi y me fui al hotel, cuando estaba por llegar, me di cuenta que me faltaba el celular. Me puse a reflexionar y creo que la presión del estrés facilitó mi descuido.
Comencé a llamar al celular desde el hotel, timbraba y timbraba, pero no contestaban, a la media hora, lo apagaron, hoy llamé temprano y nuevamente estaba apagado. Llamé de nuevo hace unos minutos y me contestó una señora, le di mi nombre y le comenté como lo había perdido, y me dijo que el dueño no estaba, y que le iba a decir que llamé, no me quiso dar su ubicación. Apago el celular y no me ha vuelto a responder.
Poniéndome a pensar en el hecho de que la señora a la que cedí el teléfono público, se haya cogido el celular, sería una pena comprobar una vez más que la mayoría de los peruanos cuando puede quedarse con sosas ajenas, se las quedan, y no importa nivel económico o educativo. Pues yo vi a la señora muy amable y sofisticada y tenía la esperanza que si lo cogió fácil me lo devolvía, quiero seguir pensando que no fue ella. Entonces ¿quien?¿Quienes estaban cerca?, haber el personal de seguridad o policial del aeropuerto, trabajadores, no había mas gente cerca, pues usé los teléfonos que estaba a la salida de los pasajeros.
Escribo este post, con la finalidad que disminuya mi frustración, impotencia y pena, de haber perdido el equipo. Sin embargo me gustaría no especular con el hecho de que la mayoría de peruanos no es honrada, alguien me dijo por ahí, en Perú hay harta rata, pero más hay en Lima, desde obreros hasta políticos, en fin no soy nadie para juzgar las generalizaciones, pero creo que las personas que opinan de esa manera, tendrán sus propios motivos.
A mis compañeros les conté y me dijeron ¿que tanto te apena el celu?, la verdad, lo que realmente me importaba, son unos videos y fotos que le hice a mis viejos la semana pasada, me da igual la música mp3, y el directorio que sé lo puedo volver a tener. Lo que pasa es que mis viejos son separados desde que nací, y muy pocas veces que logrado que estén juntos. Pero nuevamente trataré de juntarlos, hay cosas que no tienen valor económico, que sólo se dan una vez, son tan cortitos o tan largos, pero dejan huellas imborrables en nuestras almas.
Siento un carga horripilante en mi espalda, estoy en Lima ahora preparando una exposición para el lunes. Ayer con tanto ajetreo, en la media noche al momento de salir del aeropuerto quise llamar a un hotel para hacer una reservación, tenía mi agenda y el celular en la mano, así que puse el celular arriba del teléfono público, y atrás mío estaba una señora edad madura simpaticona, ella también quería usar el teléfono, quise ser amable con ella, terminé la llamada y me aleje lo más pronto del teléfono, salí rápido cogí un taxi y me fui al hotel, cuando estaba por llegar, me di cuenta que me faltaba el celular. Me puse a reflexionar y creo que la presión del estrés facilitó mi descuido.
Comencé a llamar al celular desde el hotel, timbraba y timbraba, pero no contestaban, a la media hora, lo apagaron, hoy llamé temprano y nuevamente estaba apagado. Llamé de nuevo hace unos minutos y me contestó una señora, le di mi nombre y le comenté como lo había perdido, y me dijo que el dueño no estaba, y que le iba a decir que llamé, no me quiso dar su ubicación. Apago el celular y no me ha vuelto a responder.
Poniéndome a pensar en el hecho de que la señora a la que cedí el teléfono público, se haya cogido el celular, sería una pena comprobar una vez más que la mayoría de los peruanos cuando puede quedarse con sosas ajenas, se las quedan, y no importa nivel económico o educativo. Pues yo vi a la señora muy amable y sofisticada y tenía la esperanza que si lo cogió fácil me lo devolvía, quiero seguir pensando que no fue ella. Entonces ¿quien?¿Quienes estaban cerca?, haber el personal de seguridad o policial del aeropuerto, trabajadores, no había mas gente cerca, pues usé los teléfonos que estaba a la salida de los pasajeros.
Escribo este post, con la finalidad que disminuya mi frustración, impotencia y pena, de haber perdido el equipo. Sin embargo me gustaría no especular con el hecho de que la mayoría de peruanos no es honrada, alguien me dijo por ahí, en Perú hay harta rata, pero más hay en Lima, desde obreros hasta políticos, en fin no soy nadie para juzgar las generalizaciones, pero creo que las personas que opinan de esa manera, tendrán sus propios motivos.
A mis compañeros les conté y me dijeron ¿que tanto te apena el celu?, la verdad, lo que realmente me importaba, son unos videos y fotos que le hice a mis viejos la semana pasada, me da igual la música mp3, y el directorio que sé lo puedo volver a tener. Lo que pasa es que mis viejos son separados desde que nací, y muy pocas veces que logrado que estén juntos. Pero nuevamente trataré de juntarlos, hay cosas que no tienen valor económico, que sólo se dan una vez, son tan cortitos o tan largos, pero dejan huellas imborrables en nuestras almas.
1 Comments:
Lástima por tu celu, es uno de los objetos más perdidos, extraviados o robados en Lima. Pero no lo generalices para Lima o los limeños. ¿En dónde tienes más posibilidades de encontrar ciertos personajes? ¿en un pueblo 500 mil habitantes o en una ciudad de más de 8 millones, que cada día se llena de más y más migrantes?, en todas partes se cuecen habas... Los valores se cultivan en casa. Ojalá tengas novedades positivas con tu celu.
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