Monday, April 25, 2011

Mi orgulloso voto viciado

Me quedan pocas esperanzas respecto a las elecciones presidenciales de este año. No voy a negar que daría todo por anular las elecciones y para que se convoque a un nuevo proceso.

Dicen que necesitamos dos tercios de votos nulos y blancos del total. Si sumamos los 31% y 23% que consiguieron el señor Humala con Keiko Sofia, nos daremos cuenta que suman aproximadamente el 55%, y ello inmplica que si todos los demás viciamos el voto llegaríamos posiblemente a 45% en el mejor de los casos, y para anularlo minimamente nos faltan más del 20%.

Nunca voy a olvidar lo desfavorable que fue el gobierno fujimorista, pensar en la mama de Keiko, torturada y desnuda en una carceleta del SIN, me generan escenarios siniestros para el Perú. Si Keiko permitió que ello se haga con su madre, que se puede esperar de lo que permitirá que se hague con el resto. Con la mentira que se acabo el terrorismo se creen con licencia a hacer con el Perú lo que les vengue en gana. Sin embargo si uno analisa esa época el mismo Ketin Vidal, mencionó que no tenia apoyo del gobierno, pues más bien le ponían trabas para cumplir su trabajo, los que si tenían todo el apoyo del propio Fujimori, es el grupo colina. Y nadie ya se acuerda de ello, o lo dispensan, tomando de forma muy lijera el destino del país.

Al otro lado está el inexperto señor Humala, que no tiene la más mínima experiencia en temas de gestión publica, y que nunca ha demostrado algún tipo de destreza en algo verdaderamente vano. Yo no me acordaba de que su famosa rebelión (por la que se hizo conocido) fue realizada el mismo día que fugó don "Vlady", y justo a don Vlady, se le registró llamadas al cuartel que supuestamente Humala había tomado en Tacna, en verdad ello es demasiada coincidencia. El señor Humala habla de nacionalismo (sólo tiene un concepto difuso, pero no tiene ninguna propuesta), se da de romántico y además es adicto a las necesidades de los más pobres del Perú, pero justamente ellos son los que le han puesto en el lugar que está. Ahora anda bien maquillajeado para aparecerse a Lula, cuando más tiene gestos del estilo el loco Hugo Chavez.

No sería nada raro que en el futuro se descubra que la próxima elección es un show armado por el tio Vlady, en el que sus dos marionetas la "gordita besho abacho" y su "soldadito de plomo" compiten al mismo estilo Inka Kola y Coca Cola, hijos de un mismo dueño. Ya lo hizo una vez, y no sería nada raro que lo haga de nuevo. Así que mucho ojo, y por ello no me queda otra que el vicio de mi voto.


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